Sobre imdemnisaciones ( DE ELENA)

Una piedra en el zapato le ha caído nuevamente al presidente Obama, la cual obstaculiza un tanto sus planes de amistad y ayuda a los Castro. Me refiero a las reclamaciones de los ciudadanos americanos sobre sus propiedades robadas por el castrismo. Claro está que el asunto no será gran impedimento para que continúen adelantes los planes del Sr, presidente, al cual nunca le ha importado demasiado el pueblo americano, además de que siempre tendrá a mano la excusa frecuentemente utilizada, hasta en casos aún más graves, de : " Yo no estaba al tanto ", o, " Yo no se nada de esto "
También es posible que ya se este gestionando algún fondo para resarcir económicamente a los afectados que, acallando bocas, allane el camino a las componendas.
 El gobierno español ya lo hizo en su momento, repartiendo algunas ridículas cantidades de euros, que para nada  indemnizaron el sudor, sangre y sacrificio, ni los muchos años de arduo trabajo de tantos españoles  radicados en Cuba .
Y en medio de tanta  traición, quién indemniza a los cubanos por la patria perdida, los paredones de fusilamiento, la juventud frustrada y ahogada en el Estrecho, la familia dividida, la infamia de Girón, el transbordador hundido, y estos cincuenta y tantos años de destruccion?  Obvio es que el Sr. Presidente puede pasar por encima de todo ésto .
Y a los comerciantes y agricultores estadounidenses obcecados con hacer negocios no se les ocurre pensar, dadas las anteriores experiencias de sus coterraneos, que los pactos con el Demonio no tienen ni seguridad ni garantia? O sera que el interés para lanzarse en esta aventura es con la esperanza de   que los contribuyentes acarreemos más tarde su descalabro ?
 A los que dejan de lado todo escrúpulo, pretendiendo comerciar con el ladrón y haciéndose con lo anteriormente robado, les recuerdo la frase de Juáres: El respeto al derecho ajeno es la Paz.Y a mis compatriotas de aquí y de allá que seguimos sufriendo tanta traición, para continuar con Juáres les  diré, que: La Adversidad sólo desalienta a los pueblos despreciabes .. y el pueblo Cubano no lo es en modo alguno. Ya llegará nuestro día.