DIOS SALVE AMÉRICA..
Inmensa suerte la del Embajador americano en Iran que no saliera electa la Corrupta Hillary Clinton en las pasadas elecciones. De haber estado ella en La Casa Blanca ahora él le estaría haciendo compañía a su homólogo asesinado y torturado en Bengassi, tal como sucedió en su día al infeliz Embajador ante la total indiferencia de la Clinton, (y de Barack Obama), durante su desempeño como Secretaria de Estado.
También es una gran suerte para todos los ciudadanos Americanos el que no tengamos actualmente a ningún Demócrata vendepatria gobernando este gran país. Tiempo llevan comportándose como si no tuviesen otro objetivo mejor que el de procurar su decadencia, aún más, su destrucción. Sólo hay que ver a los Congresistas Demócratas enfocados en cuerpo y alma en el famoso empeachment, que de sobra saben que no los va a llevar a ninguna parte, pero la Bruja Pelosi insiste en seguir perdiendo el tiempo, gastando el dinero de los contribuyentes, y descuidando asuntos de verdadera importancia que requieren la atención de sus cargos, desacreditando al presidente y tratando de menoscabar su autoridad hasta en su condición de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.
Absurda pretensión, pero es que en el colmo de la desvergüenza también se dedican a tratar de víctima, y casi héroe, al asesino Suleiman, que bien sabemos que sus siniestros planes no se limitaban sólo al ataque de la Embajada. Sus pretensiones iban mucho más allá en su afán de hacernos el mayor daño posible. Pero a los Demócratas sólo les falta abrir un Libro de Condolencias como en Cuba y Venezuela, y nada extraño seria verlos desfilar en compungida actitud para expresar su incondicional solidaridad y adhesión a la causa del Terrorismo.
Los que representan a este Partido se han convertido en una verdadera vergüenza y un gravísimo peligro para el país que deberían defender, amar y respetar.
Bueno, no es que se han convertido, siempre han tenido una gran inclinación a la traición. Los cubanos bien que sabemos de ello. No hay más que recordar a Kennedy. Pero cada día se superan a si mismos.
Entre tanto se la pasan vaticinándonos las terribles revanchas que nos aguardan como apocalípticos agoreros, o más bien, como sugerentes ideólogos de cómo pudiesen masacrarnos con mas efectividad. No les hace falta a estos criminales terroristas que se le sugieran tantas ideas, experiencia y practica tienen de sobra. Años llevan practicando la destrucción y la muerte hasta con sus propios pueblos.
Pues bien, los Demócratas los justifican y casi que los aplauden.
Dios nos salve de caer en tan traidoras y cómplices manos, tengámoslo muy en cuenta para la próximas elecciones por nuestro propio bien y por la seguridad nacional.
De ganar ellos nos aguarda lo peor. No podemos permitirlo. América merece una mejor suerte por la Seguridad y la Libertad de todo el Mundo Libre.
Inmensa suerte la del Embajador americano en Iran que no saliera electa la Corrupta Hillary Clinton en las pasadas elecciones. De haber estado ella en La Casa Blanca ahora él le estaría haciendo compañía a su homólogo asesinado y torturado en Bengassi, tal como sucedió en su día al infeliz Embajador ante la total indiferencia de la Clinton, (y de Barack Obama), durante su desempeño como Secretaria de Estado.
También es una gran suerte para todos los ciudadanos Americanos el que no tengamos actualmente a ningún Demócrata vendepatria gobernando este gran país. Tiempo llevan comportándose como si no tuviesen otro objetivo mejor que el de procurar su decadencia, aún más, su destrucción. Sólo hay que ver a los Congresistas Demócratas enfocados en cuerpo y alma en el famoso empeachment, que de sobra saben que no los va a llevar a ninguna parte, pero la Bruja Pelosi insiste en seguir perdiendo el tiempo, gastando el dinero de los contribuyentes, y descuidando asuntos de verdadera importancia que requieren la atención de sus cargos, desacreditando al presidente y tratando de menoscabar su autoridad hasta en su condición de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.
Absurda pretensión, pero es que en el colmo de la desvergüenza también se dedican a tratar de víctima, y casi héroe, al asesino Suleiman, que bien sabemos que sus siniestros planes no se limitaban sólo al ataque de la Embajada. Sus pretensiones iban mucho más allá en su afán de hacernos el mayor daño posible. Pero a los Demócratas sólo les falta abrir un Libro de Condolencias como en Cuba y Venezuela, y nada extraño seria verlos desfilar en compungida actitud para expresar su incondicional solidaridad y adhesión a la causa del Terrorismo.
Los que representan a este Partido se han convertido en una verdadera vergüenza y un gravísimo peligro para el país que deberían defender, amar y respetar.
Bueno, no es que se han convertido, siempre han tenido una gran inclinación a la traición. Los cubanos bien que sabemos de ello. No hay más que recordar a Kennedy. Pero cada día se superan a si mismos.
Entre tanto se la pasan vaticinándonos las terribles revanchas que nos aguardan como apocalípticos agoreros, o más bien, como sugerentes ideólogos de cómo pudiesen masacrarnos con mas efectividad. No les hace falta a estos criminales terroristas que se le sugieran tantas ideas, experiencia y practica tienen de sobra. Años llevan practicando la destrucción y la muerte hasta con sus propios pueblos.
Pues bien, los Demócratas los justifican y casi que los aplauden.
Dios nos salve de caer en tan traidoras y cómplices manos, tengámoslo muy en cuenta para la próximas elecciones por nuestro propio bien y por la seguridad nacional.
De ganar ellos nos aguarda lo peor. No podemos permitirlo. América merece una mejor suerte por la Seguridad y la Libertad de todo el Mundo Libre.
ESCRITO DE ELENA
